Valoración escultura madera

 

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En un plazo de 48 horas, recibirá una valoración objetiva, confidencial y sin compromiso basada en los resultados de subastas y ventas en galerías privadas de esculturas similares. Para confirmar esta estimación inicial, organizamos una tasación gratuita in situ de su colección de esculturas de madera en algunas ciudades de España.
Nuestra red de expertos en arte reconocidos le ayudará en la venta de su escultura defendiendo sus intereses lo mejor posible.

Las esculturas de madera circulan en gran número en el mercado del arte. Sus estimaciones y precios de compra pueden variar mucho en función de su antigüedad, rareza, reputación del escultor o procedencia.

La técnica de la talla en madera es muy antigua. Como la madera es un material perecedero, han llegado hasta nosotros muy pocos ejemplos verdaderamente antiguos. Muchas culturas de todo el mundo han desarrollado una tradición de talla en madera. En Europa, las esculturas más antiguas proceden de la Edad Media. Las esculturas religiosas son omnipresentes; a menudo estaban destinadas a formar parte de un edificio religioso (iglesia, monasterio o convento). Objetos con una función litúrgica o devocional, los temas más comunes son los del Nuevo Testamento, como la Virgen María o Cristo crucificado. Se pueden distinguir diferentes escuelas, como la alemana y la italiana, que continuaron y evolucionaron durante el Renacimiento. Se diferenciaban por su factura, su iconografía y la madera utilizada (roble, olmo, nogal, peral, etc.).

En el mercado del arte, la rareza de una estatua antigua de madera puede llevar al experto a dar una valoración elevada. El estado de conservación y la autenticidad también desempeñan un papel a la hora de determinar el valor. En 2018, por ejemplo, una talla en bulto redondo de madera ahuecada, policromada y dorada de finales del siglo XV (Italia central), que representa a una joven con un libro, se vendió por 32.500 euros en una subasta (Artcurial París), triplicando su estimación máxima.

Posteriormente, la madera se abandonó a menudo por otros materiales menos perecederos como el mármol o el bronce. A finales del siglo XIX, algunos artistas de moda utilizaron la madera en sus esculturas y bajorrelieves. Paul Gauguin y Georges Lacombe se encuentran entre los más atrevidos. Las estimaciones y los precios de compra de este tipo de esculturas, a menudo con motivos inspirados en culturas no europeas, pueden ser extremadamente elevados. En 2015, una escultura de madera dorada de Paul Gauguin titulada «Thérèse» se vendió en una subasta (Christie’s Nueva York) por 25.613.500 euros.

A principios del siglo XX, algunos escultores cubistas, entre ellos Pablo Picasso y Ossip Zadkine trabajaron la madera y le aplicaron su visión vanguardista. La singularidad de las esculturas de madera (en contraste con las de bronce) las hace a menudo muy valiosas, sobre todo si son de artistas con un buen valor de mercado. Así lo confirman los resultados de las ventas. En 2017, por ejemplo, una escultura de madera dorada de Ossip Zadkine, fechada en 1919 y titulada «Tête d’homme, Bouddha» (Cabeza de hombre, Buda), se vendió por 787.200 euros en 2017 (Millon Paris).

La talla en madera no es patrimonio exclusivo del arte europeo. Muchas culturas africanas, oceánicas, asiáticas y americanas han producido esculturas de madera. Estatuas, máscaras, tótems, su enorme diversidad no puede reducirse a una sola categoría.

Si posee una escultura de madera, le recomendamos encarecidamente que la haga tasar por un experto en arte para establecer una estimación lo más cercana posible a su valor de mercado.

Lombardía, séquito de Giovanni Angelo Del Maino, ‘Crucifixión con la Virgen, San Juan y Santa María Magdalena’, panel de nogal tallado en relieve, 59 x 44 x 9 cm, vendido por 6.500 euros en 2015 (Tajan París)